Por: Miguel Fernández
(Ciudad Piar.) Ante la
carencia de una política preventiva que contemple la avatización, educación
sanitaria y el control del flujo de los trabajadores de la minería, entre otros
factores, han dado pie al repunte del paludismo en el municipio Angostura.
Diariamente decenas de personas se hacen
presentes en la sede del centro de Diagnóstico Integral de Ciudad Piar, donde
se realizan exámenes de certificación o descarte de tal enfermedad, para luego
entregar rigurosamente el
debido tratamiento.
Dentro del promedio de 40 a 60
personas se atienden diariamente, provenientes de sectores aledaños a ésta
ciudad, y también de lugares lejanos, especialmente donde se trabaja la
minería. Cuando escasean los reactivos, los pacientes deben acudir a un
laboratorio privado, destacando que la mayoría son personas de escasos recursos
económicos.
Sin embargo se alertan a las
autoridades municipales y sanitarias para que implementen las contingencias del
caso, ya que no se está fumigando, la basura reina por doquier, junto a las
aguas negras, generando nubes del vector y el número de afectados crece
constantemente.
Niños, mujeres
embarazadas y ancianos, los más vulnerables al flagelo palúdico.
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