Se habla de mucha plata y prosperidad.
Los chinos serán dueños del
hierro.
Por: Oscar Jiménez
(Ciudad Piar. Especial) Esa
concentración de tantalio y niobio, al cual le dan la nomenclatura comercial de
coltán, está encendiendo los faroles en el municipio Angostura, no tanto por
los anuncios gubernamentales que estamos acostumbrados a su rimbombancia y nunca llegan a nada, nó eso, no. Es por la
cifras que ruedan por las redes del mundo sobre lo que cuesta ese metal refractario,
lo que puede generar en divisas y sobre la multitud de ambiciosos frotándose
las manos.
De los confines de Parguaza, allá,
entre Amazonas, Bolívar y Colombia, saldrá hacia Angostura el oro azul para su
trituración, molienda y concentración en la planta piloto de FMO, cerca de
Ciudad Piar y Mereicito. Los voceros oficiales hablan de millonadas de dólares
dentro del proceso y mercado hacia otros confines, donde la tecnología avanzada
de la electrónica deja a la gente con la boca abierta. El ultraconductor es
esencial para la industrialización de la telefonía móvil, condensadores, industria
aeroespacial, mnemotécnia, la despiadada industria militar y paremos de contar,
porque la super-resistencia de éste mineral se pierde de vista.
El Gordo Cano no se cansa de vociferar por la tv, que el
coltán es una panacea, mientras lo secunda una embelesada audiencia. Ya sabemos
que un cártel se estaba conformando por predios fronterizos y en sacos y latas
se llevaban el preciado coltán a predios colombianos. En Venezuela lo más
rápido de organizar es un cártel; es decir, una mafia. Por las Europas, Japón,
chinos y otros anhelantes de buenos negocios, ya preparan su contacto con el
mercado negro que podría ensayarse. Tú sabes, que no todo es el libro blanco de
las cuentas claras, como estamos acostumbrados a exhibir.
En el municipio Angostura, siempre se
piensa y se actúa, como muestra de los políticos que nos han tocado, lo más bajo; o sea, las pendejadas del negocio.
Unos hablan de las chambas, otros de la mejora de la carretera a Mereicito,
otros de subir un poco los impuestos a la FMO y a la socia que trae. Algunos de
meterse con un autobusito o la perrera en el transporte, los demás en vender
café, empanadas y cervecitas caleta. Por eso, estamos jodidos. En otros lados
se comerán el lomito y acá tirarán las sobras.
Como testigo de los políticos
pendejos que nos tocan, allí está un Cerro Bolívar como perro andrajoso,
esperando que los chinos le lleven el poco pellejo que le dejaron los gringos.
Todos prosperaron a costillas de ese cerro, hasta Puerto Ordaz como metrópoli y
nosotros, apendejeaos, llenos de aguas negras, arrechos por los cortes de luz,
colmados de basura por todas partes, especulados por los bodegueros españoles,
sin un lugar ni club para echar vaina sanamente; es decir, en la carraplana.
Bueno, ahora llegó el coltán y según al Gordo Cano, nos vamos pá rriba.
De paso el gobierno dice que los chinos van a tomar el
control del hierro y la cosa da que pensar, sobre cómo será la cosa dentro de
poco. Yo desde El Guarapo, cuando la aurora llega con sus dedos de oro, me
pongo a meditar viendo los cerros. Primero, salir de esos políticos mediocres
que tienen como meta engordar un hato, un negocito por allá, cuatro carritos y
un camión, un apartamentico, una platica asegurada y joder a los cuatros
pendejos que siempre hemos sido. Segundo, armar cuadros de gente arrecha y
comprometida, estudiada y honesta, gente que se le plante a todo bicho de uña,
sea del gobierno, chino, marciano o lo que sea; eso sí, sin complejos, carajo,
porque estamos defiendo lo nuestro.
Vamos a estar mosca con el coltán y
los chinos del hierro, vamos a pedir lo que nos toca, sin aceptar bagatelas.
Saca las cuentas Pedro Blanco, tú que eres arrecho, en economía, que no pueden
volver a joder y Ciudad Piar, Tocomita y Santa Bárbara, podrían quedar igual
que una iguana, oyendo silbidos.
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